SENTADA FRENTE A MI
- Erlyn Lopez
- 25 jul 2019
- 6 Min. de lectura
Actualizado: 27 jul 2019

A medio día a la hora de almuerzo le llamo para comer (comerte a ti), nos vemos en el centro le digo, como siempre nunca dice si o no solo sonríe y es suficiente.
Una vez en el lugar ese que ya se nos hizo costumbre susurro en su oídos (Quiero, Comer-Te!! a Ti), súbito sin pensarlo me toma de la mano sonriendo con las cejas expresivas y salimos a un mejor sitio escogido por ella.
A 2 o 3 calles de allí una posada turística con servicio a cuarto, discreta y acogedora. Esta vez me tocaba a mi ser el seguidor y me gustaba. Estando ya ubicados tratando de ponernos cómodos, avisamos que llegaríamos tarde cada cual invento su historia y no porque haya que justificar nuestras salidas sino por un tema laboral para no tener problemas con los Jefes.
Una vez cumplido con los detalles protocolares del caso nos dedicamos uno al otro, pedimos comida ligera por la ocasión, algunas cervezas, soleras sin pensar en otra cosa, conversamos desde luego, no hay mejor placer que oírle hablar aunque a veces siento que solo le gusta que la oiga pero que no me oye en ocasiones, pero eso es otra cosa. Me dice hoy solo seras un espectador, tienes prohibido lo que yo te prohíba y permitido lo que te permita y hoy esta prohibido todo, solo puedes mirar.
Quede pasmado pues asumió una postura de las que yo asumo y es excitante por lo frustrarte que llega a ser. Acepte, me guió a una silla de mimbre muy cómoda que estaba en la habitación, pidió un café una cerveza más y unos cigarrillos, cuando digo que estaba cómodo es porque lo estaba.
Entra al baño se demora un buen rato, creo que tenia todo preparado porque entro con una ropa y salió con otra, una falda tipo odalisca, el cabello le cubría el rostro, estaba encantadora olía a coco y durazno, que olor tan exquisito el de tu piel y el coco.

Saco su teléfono coloco música, pensé por el atuendo que seria flautas y tambores indios o árabes, pero no fue algo mas lento tipo música de cabaret, sensual, atrevida, excitante. Comenzó la danza moviendo el culo justo en mis manos se alejo dando paso largos invitándome a seguirme, pero las reglas me lo prohibían, yo debía permanecer sentado sin importar lo que pase a menos que de su boca saliera lo contrario.
Obediente solo observar como su cuerpo se contoneaba y saltaba de un lugar a otro mientras poco a poco las prendas con que vestía iban quedando el suelo de la habitación que ya se sentía el calor y el olor a sexo y pasión, su sudor me fascina aunque ella me dice que no me soporta cada vez que le digo que huele rico cuando esta sudada.
El calor y el sexo es evidente en mis pantalones, estoy que si me toca exploto en un orgasmo de eso se disfrutan con los ojos cerrados. El baile continuo por unos minutos más hasta que la ultima prenda que llevaba estaba en el piso, se acerco a mi con intención de intimidarme con su cuerpo desnudo, mis manos atadas por la promesa no podían tocarla pero ella a mi si, y comenzó a acariciarme con sus tetas y rozaba su totonita por mis manos, dejando su humedad en mi y ese olor que vuelve loco.

Tomo una silla la puso frente a mi, me pidió un trago de cerveza limpio su rostro del sudor y comenzó a acariciarse el cuello con la botella húmeda y bajo hasta sus tetas y el ombligo siguió por su piernas y me regreso la botella. Estaba a punto de faltar a mi promesa de portarme bien pero seguí controlándome, suspire y sonreí.
Con el mismo impulso de la botella comenzó a acariciarse las piernas mientras conversaba sobre como me veía sentado en esa silla todo sumiso con ganas de comérmela pero que estaba prohibido, sus manos iban en un baile al son de la música que aun sonaba en su teléfono se paseaban desde su ombligo hasta sus axilas y de allí a su cuello y labios, cuando su respiración se agito más era evidente por la humedad de sus entre piernas sus manos se fueron directo a su coño, acariciando sus labios suave y lento tomando la humedad que emanaba de ella, la otra fue a sus tetas que apretabas mientras suspirabas con gemidos entre cortados.
Yo, solo observaba ese evento no podía mas que deleitarme con verte dándote placer mientras mi nombre se escapaba de tus labios en cada roce de tus dedos en tu clítoris.
Me pediste que guiara tus manos con mi voz, -(al fin podía participar), comencé a decirte donde tocarte, como tocarte, el ritmo y la frecuencia, le pedí que cuando estuvieras a punto de alcanzar el orgasmo pararas cualquier roce en tu piel.
Primero comencé por guiarte a tu boca, acariciar con tus manos como si fueran las mías propias y sentir tus labios abrirse por el roce de tus dedos siguiendo mis comandos no podía ser mas excitante para mi en ese momento. El recorrido fue directo a tus tetas con tus dedos ya húmedos le pedí que hicieras círculos en tus pezones y cuando se agotara la humedad volvieras a tu boca por mas saliva, mientras tu mano derecha seguía mis ordenes la izquierda estaba ociosa, le pedí que la llevaras a tocar tus nalgas, de la forma que estabas sentada en la silla tenias facial acceso a ellas. Aprieta tus nalgas mientras acaricias tus pezones, azota un poco tus nalgas y pelliza tus pezones le pedía incesante y dije detente.
De inmediato tus manos dejaron de moverse, vamos a calmarnos un poco dije entre dientes. Ponte cómoda, relájate y cuando iba decir la próxima palabra revocaste mi privilegio de comandar, te pusiste levantaste en sobre la silla con un pie en la tuya y el otro en la mía, fuiste directo a poner tu coneja en mi cara, el olor y el calor, esa humedad me tenia casi a reventar de deseo, mi lengua un par de veces intento alcanzarla pero no me lo permitía, sus dedos comenzaron a friccionar su clítoris lento y constante, firme y nuevamente su respiración se aceleró y el ritmo de sus manos varió, me tomaste de la cabeza mientras ya estabas metiendo tus dedos en tu interior, chapoteando la humedad en ti, esparciendo el aroma por toda la habitación, aroma a placer, aroma a orgasmo ese aroma que le dije que es casi imperceptible y yo note desde el primer día que hicimos el amor.
Seguía luchando por no alcanzar el orgasmo y tenerme mucho mas tiempo disfrutando de tenerla así pero no puedo contenerse más y en un suspiro y esgrimiendo una frase que nunca falta en sus orgasmos se deje venir sobre mi cara, se tomo de la pared que estaba detrás de mi y me paso su colmena húmeda y satisfecha por la cara llenándome de las mieles de su placer.
Yo aun sin poder hacer nada pues me pidió que no hiciera nada, bajo de la silla, tomo mis pantalones los desabotono me pidió que levantara el culo y saco los putos pantalones dejando en bóxer con una erección caliente entre las telas y una humedad que pareciera que me oriné.
Sacó mi verga y sin mucha prisa pero sin perder el ritmo lo metió en su boca directo hasta el fondo llenándolo de saliva y se levanto se inclino de culo sobre mi y lentamente se fue sentando en mi verga, sentía como se deslizaba mi verga dentro de ella húmeda y apretada, estaba apunto de explotar si no tomaba el control no podría resistir mas, no me lo permitió con sus manos tomo las mías en forma de esposas y con su peso no dejaba que me moviera mientras me cabalgo por alrededor de 2 minutos cuando mucho, siento como explote dentro de ella, mi semen salia y la llenaba.
El calor de mi semilla fue directo al calor de tu humedad que tenia rato recorriendo mi ingle, sentí que me apretaba la verga con un ritmo que fue disminuyendo como 5 o 10 según duro, había alcanzado un nuevo orgasmo con solo sentir mi semen recorrer su vagina (eso si no me lo esperaba).

Se levanto, fue al baño y se ducho tomo un trago de cerveza fumo un cigarrillo mientras yo aun sentado esperando me liberara de mi posición de sumiso.
Me miró y se acerco besando mis labios bajo a mi verga y me dio una mamada que hizo que me volviera a correr en su boca y subió y beso mis labios y dijo, ya lo prohibido no esta prohibido y lo permitido esta permitido, ve a asearte que vamos tarde.
Luego de ese par de horas de almuerzo creo que el mejor de mi vida, seguimos practicando eso de ceder el poder porque me gusto someterme a ella, lo único que no me gusta es no poder controlar cuando correrme siempre logra que me venga en menos de 5 minutos, de resto adoro salir a almorzar a esa posada turística de vez en cuando.
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