Bailando en el Universo. Ahora en la distancia

Después de tanto tiempo, aun seguimos bailando, como en aquel momento cuando eramos solo luces en el universo, esta historia no termina, somos espíritus unidos por algún lazo divino desde antes de nacer.

Los recuerdos de aquella danza celestial en el espacio llegaron a mi en el instante en que te vi, te reconocí y me reconociste, pero en esta vida nos toco bailar en la distancia, aunque nuestras mentes estén unidas en un pensamiento constante entre nosotros y nuestras almas se reclamen entre si, las circunstancias actuales nos impiden acercarnos como nuestro corazon desea.

Danzamos una y otra vez en aquella inmensidad, por eones orbitamos uno al lado de otro, pero en mis ganas de experimentar la existencia física, me aleje de ti, y baje hasta aquí, desde aquel instante te he estado buscando una y otra vez, en cada rostro, en cada pecho, en cada par de pies, en cada par de ojos con los que me he topado, sin éxito. Hasta aquel día en que te mire fijamente a los ojos, después de sentir tu alma llamarme, ese día te reencontré.

Pensé que esta vez todo seria mas sencillo que las ultimas veces que nos habíamos cruzado, esta vez si pudimos hablar, tocarnos, amarnos, brillar en los ojos del otro, bailar como hojas al viento, como aquel recuerdo divino del cielo infinito de donde venimos y prometimos bailar hasta el final de la existencia, por todo el Universo.

Bailamos en el Universo durante eones y llevamos siglos bailando en la distancia por mi culpa, por mi necesidad de experimentar la vida humana y no me arrepiento, porque sabia te iba a encontrar. Y las veces que lo hemos hecho, hemos sido felices por los 5 minutos que supone el tiempo que nos toca, 5 minutos que a veces son un suspiro, y a veces una eternidad, 5 minutos donde el reloj se detenía y nada mas importaba ya.

Esos 5 minutos, que en esta oportunidad se convirtieron en agua fresca, en aire nuevo, en esperanza, en Amor, en eso que nos hacia falta y que supimos de inmediato que teníamos el uno para el otro, pero llegamos tarde una vez mas.

No toca por ahora solo bailar en la distancia, orbitandonos uno al otro, unidos por esa amalgama invisible de las almas destinadas a pertenecer.

Y es que a veces, nos puede mas el miedo que lo que esta destinado a ser.

Bailemos en el Universo una vez mas aunque sea en la distancia. Tu arte y el mio aun se aman, eso es algo que prometo no cambiara y sabes que mis promesas no son solo palabras.

Bailemos en la distancia como mariposas polinizando flores blancas con aromas exquisitos, como hojas al viento, como pompas de jabón a contraluz, bailemos sobre hojas secas y que el crujir nos recuerde, que aunque distantes, estamos tan cerca que podríamos acariciarnos solo con el pensamiento.

Aromas a canela y miel, a té recién infusionado, a frutas rojas, a durazno y piña, melodías que resuena en nuestra mente, que nos hacen prisioneros de los besos y las sonrisas, que sin saber porque una sensación extraña sentimos al escucharnos el corazon, comenzamos a creer en el otro y el amor, piel con piel nuestro corazon se desarman, porque contigo en la distancia no existe momento en el día en que podamos apartarnos del otro, y desarrollamos el sentido del olfato, aprendimos lo que una rosa significa, mientras decíamos mentiras piadosas para poder escaparnos e ir a nuestro encuentro a bailar cerquita, donde las palabras fueron reemplazadas por miradas, mientras nacía en tus letras M de mujer maravillosa y mágica, y de tus A de Ángel divino que me vino a visitar y de la L de locura nacía las mejores Lunas llenas que pudimos mirar y el cielo se Convirtió una vez mas en nuestro escenario, en nuestro lugar para bailar.

Pero esta vez en la distancia